martes, 19 de marzo de 2013

50 - In-formación



50
In-formación

Hoy recuerdo aquellos días en que el arzobispo de Buenos Aires, Bergoglio, fue elegido Papa. En realidad mi interés no está en ese hecho sino en todo lo que se hizo evidente a partir del mismo. Recuerdo muy bien como de pronto todos los medios de difusión se plagaron casi en su totalidad de noticias acerca de esta elección. 


De pronto nos enteramos acerca de su vida y de algunos de sus hechos. Aparecieron fotos y desmentidas, como aquella en que aparecía dándole la comunión a Videla, de la que luego se dijo que era un simple truco, o de su complicidad con las fuerzas armadas durante la dictadura militar, y al mismo tiempo, en otros medios salían noticias desmintiendo esto y declaraciones de personas indubitables. En fin, por todos lados se veían las hilachas. Para dónde cada uno mirara encontraba algo diferente y contradictorio, por una lado quienes festejaban y adornaban al elegido, por el otro quienes lo denostaban. Todo en una continuidad alienante, enfermante, cuando no declaradamente hipócrita y mentirosa como personas que públicamente declararon contra la iglesia y este nombramiento cuando unos meses antes se sacaban fotos besando el anillo del que fuera Papa Benedicto.

Todo esto me pareció, más que un aparataje político partidario, un despliegue de miserias humanas exhibidas desvergonzadamente, publicadas a todos los vientos que quisieran llevarlas.
Esto que les cuento me estimuló a pensar en los medios de difusión. Medio es aquello que está, o al menos trata de estar,  en equilibrio, ni de un lado ni de otro, ni blanco ni negro. En este caso, su objetivo es la difusión, o sea conectar, divulgar. Evidentemente los medios no están en esta zona de equilibrio.
¿alguna vez lo estuvieron?
 Ellos surgieron como herramientas de los poderes y muchas veces se convirtieron ellos mismos en factores de poder. Son un medio de control social y de manipulación ideológica. Y estoy hablando de todos ellos, sin distinguir entre “buenos” y “malos”, veraces y mentirosos, amarillistas y correctos, de derecha o de izquierda,  todos, cada uno a su modo, tienen el mismo objetivo.
Las noticias son la excusa, no son ellas las que se busca difundir, sino lo que está detrás, lo que no es evidente, las ideas.  Los medios fueron creados para in-formar, para dar forma desde adentro a las cabezas de las personas, para inocular ideas que en última instancia son ideología. 




Los medios de in-formación, o sea los medios ideológicos de los poderes siguen buscando tenernos prisioneros de sus intereses. Tanto los de  un lado como los del otro. Porque aquellos que andamos por las veredas terminamos siendo capturados y penetrados por mensajes que no nos ayudan a pensar sino que buscan alienarnos, hacernos dependientes de lo que otro piensa y decide.
Y si cansado de ser llevado de un lado para otro, alguien decide romper y alejarse ya están listas las telas de araña de los tinellis, de los entretenedores, de los mediocres, dispuestos a atrapar a todos quienes puedan. La finalidad igualmente se cumple, alejar a las personas del pensamiento social, de la vida que quisieran vivir para dormirlos con el opio del entretenimiento y de lo “divertido”.

Hoy alguien podría decir: la verdad no existe, solamente el relato. Los hechos se convierten en cultura cuando son vistos e interpretados, cuando son ingresados a la palabra, eso es cierto. Este proceso siempre, indefectiblemente, implica la subjetividad, el punto de vista particular de quien observa y relata, y con esto su ideología. Esto es construcción del relato, la aceptación de que no se percibe directamente la realidad, las cosas como son, sino que siempre son vistas con nuestra subjetividad e interpretadas en base a nuestra experiencia y modo de pensar. Por eso un mismo hecho puede pasar para algunos inadvertido, para otros ser indiferente, para otros tener un significado importante. El hecho no cambia, lo que varía es nuestra inserción, y como lo vamos relacionando con todas nuestras otras ideas y como vamos dando una coherencia y sentido. Es este un proceso muy complejo que siempre hacemos aunque no nos demos cuenta y que llamamos interpretación. O sea que cuando narro, difundo un hecho, en realidad lo que hago es difundir mi interpretación filtrada por mi ideología. Pero todo esto es algo muy diferente a usar la palabra de manera conciente y premeditada para distorsionar y para manipular, eso ya no es construcción del relato, sino simple mentira.

Si Bergoglio es el que mostraron unos u otros hoy no es el tema sino como desde ambos lados intentaron manipular mis ideas, nuestras ideas, y seguramente en más de un caso lo lograron. Antes de esto yo tenía ya mi pensamiento al respecto formado y seguramente Ud. también, pero hay muchísimas otras personas que quizá nunca reflexionaron al respecto, es a ellos a quienes está dirigida esta maniobra, y el resultado es que sigan sin reflexionar, sigan esperando recibir los datos ya masticados, ya pasado por el filtrado del poder.

Como les decía, los medios son parte del poder y desde él hablan, y así como el poder no es uno, no unidad monolítica, no es homogéneo sino que existen muchos actores que se disputan mutuamente el control, es necesario que haya muchos medios para representar esta diversidad, pero repito, todos ellos son parte del poder. Cada uno encarna un interés en particular, y busca que la balanza de la mayoría del pueblo se incline hacia su lado. Es por esto que vemos luchas entre unos y otros, acusaciones varias, las noticias de unos son desmentidas por los otros, esta es  la puja entre distintos factores de poder.

Hace muy poco encontré un blog que mostraba como se manipulaba la información sobre todo la gráfica, especialmente cuando eran publicadas fotografías, se podía ver cómo mientras en un medio salía una con varias personas, en otro salía la misma situación, la misma foto, pero una de las personas había sido borrada….A esto le llaman construcción del relato, lo que no gusta, lo que puede caer mal o mostrar la verdad, es borrado, es desaparecido.




El surgimiento de los medios alternativos fue y es una salida para el pueblo, para aquellas ideas que no son permitidas por lo establecido y que no tienen el poder suficiente como para salir en los medios de gran peso. Por eso la importancia de que las comunidades, los grupos, tengan la posibilidad de hacerse conocer y exponer públicamente sus ideas. Pero aún en esto es necesario estar alerta porque muchas veces son lobos disfrazados de ovejas, son simples repetidoras de los factores de poder más pesados, son agencias de partidos políticos que desde su posición siguen buscando inocular las ideas de los otros.

Otro tanto podemos decir de internet, una herramienta fuertísima para encontrarse con la diversidad, con otros modos de pensar e interpretar los hechos, capaces de hacernos pensar, entender de otra manera, unir cosas que parecían separadas.

Lo positivo de todo esto es que nos ayuda a no dormirnos al obligarnos a estar atentos, a no creer en un lado ni en el otro, a tener siempre lista la sana desconfianza, a ejercitar la duda que abre caminos. Sospechemos cuando alguien nos dice “la verdad”, porque la verdad seguirá siendo lo imposible.

Dicen que el principal miedo de la humanidad es a la libertad, al riesgo que implica trazar el propio camino porque eso significa ir rompiendo, apartándonos de todos los demás, de nuestros referentes y también el riesgo a no ser aceptados, a ser mirados de mal modo y hasta excluidos. Dejar de ser niños que se esperanzan por la llegada de los reyes magos y asumir la adultez de saber que “el cielo no es azul ni es cielo”  es duro y difícil de afrontar. La tentación a ser parte del rebaño es muy grande, porque el rebaño nos libera de nuestra conciencia. Ser creyente es parte de este juego, creer que los medios nos dicen lo que sucede, dejarnos guiar por ellos, es también claudicar nuestra conciencia y depositarla en alguien, en otros, y esperar que nos conduzcan, que nos digan qué pensar y hacia dónde ir, es seguir creyendo en los reyes magos o en papás  todopoderosos.


Termino con un poema de Alberto Arias que dice

Ya casi un ciudadano más
volví mis ojos hacia ella.
Y aunque no la vi —o nada vi—
alcancé a oír su verdad
profunda y vacía y negra:

—“Abandonad toda fe,
    creencia y superstición,
    amos, dioses y demonios.
    Y conservad la fuerza,
    la esperanza
    y la libertad.”

Mafalda. Quino




La mayoría de las IMAGENES han sido tomadas desde la web, si algún autor no está de acuerdo en que aparezcan por favor enviar un correo a  alberto.b.ilieff@gmail.com y serán retiradas inmediatamente. Muchas gracias por la comprensión.










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