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En libertad vigilada
No sé cómo
calificarla, se me ocurre pensar que los humanos tenemos una especie de ceguera
o autoengaño esperanzado, creemos que todo tiempo pasado fue mejor y que lo que
viene siempre puede ser peor.
¿Por qué
digo que es un engaño?
Porque seguramente
ese pasado que creemos que tuvo cosas mejores que este presente como por
ejemplo los terrenos baldíos en que jugábamos, la calle como lugar liberado
para los juegos y complicidades, el aire más puro, el cielo con estrellas, las
frutas sin tóxicos, también tuvo cosas
peores como las enfermedades que en aquel tiempo eran mortales y hoy son
contenidas.
Creer que
el futuro puede ser peor también es una manera de no ver el presente, de no
darnos cuenta que ese futuro depende de lo que hoy hagamos, que no aparecerá mágicamente
por designios divinos y si miramos más de cerca el hoy quizá descubramos que ya
estamos en la pesadilla.
Vuelvo a
ese género llamado ciencia ficción que siempre me ha impresionado por su
capacidad de videncia, por anticipar en muchos años un posible futuro, es
clásico citar a Julio Verne quien pudo describir viajes a la luna, submarinos y
otras proezas muchísimo antes que fueran realmente pensadas por la ingeniería. La
ciencia ficción nos muestran un mundo hiper conectado a través de aparatos muy
sofisticados, con casas computarizadas que obedecen a órdenes verbales, coches
que vuelan, y otras maravillas, pero, y aquí está la cuestión, quienes viven en
estas sociedades también estan hiper controlados, los mismos aparatos que les
favorecen la vida son los que los registran y delatan ante el gobierno. Estamos
hablando de mundos policíacos, donde todo habitante esta bajo estricto control.
La noticia
es que ese mundo que se nos muestran como posible de suceder en el año 2500 o
3000, ya esta acá, ya es parte de nuestra vida diaria. Un detalle, los
teléfonos inteligentes pueden ser rastreados en todo momento y ubicados, o sea
que si ud tiene uno de esos aparatos, en todo momento se puede saber dónde
esta. Quienes tienen poder de decisión a gran escala saben que en determinadas
charlas o reuniones es mejor dejar los teléfonos en otros despachos o apagarlos
o incluso quitarles la batería pues es posible que a través de ellos sean
escuchados.
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| Drone con Argus.IS |
En otra de
nuestras charlas también hablamos de los drones, esos aviones no tripulados
capaces de matar y también de hacer vigilancia.
Hace poco
una noticia recorrió el mundo y mostró ya sin lugar a dudas, tanto que nunca
fue desmentida, que todas y todos, absolutamente sin restricción, estamos
controlados. No estoy hablando de algo que ya conocemos, que las redes
sociales, no importa cuales, son rastreadas por los servicios de inteligencia,
además de ser usadas como aparatos de propaganda partidaria. También sabemos
que nuestras llamadas pueden ser escuchadas y grabadas.
Edward Snowden, es un norteamericano que trabajó para la CIA
como analista y luego para una empresa
de seguridad que proporciona servicios a la Agencia de Seguridad Nacional de
Estados Unidos, reveló que ésta y el FBI
tienen acceso a los registros electrónicos de la operadora telefónica Verizon,
una de las más grandes de ese país, y de
los servidores gigantes de internet Google, Yahoo, Facebook, YouTube, Skpe,
AOL, Apple, Microsoft por medio de un programa llamado PRISM (prisma). Los
datos capturados, correos electrónicos, fotos, vídeos, chats, redes sociales,
tarjetas de crédito, no son solamente de los habitantes de Norteamérica, sino
también de otros gobiernos o sus funcionarios, y de cualquier persona del mundo
que cuente con algún aparato conectado a
estas redes.
 |
| Edward Snowden |
“La NSA ha levantado una infraestructura que le permite
interceptar prácticamente todo y capturar la inmensa mayoría de las
comunicaciones humanas de manera automática y sin seleccionar los objetivos.
Si, por ejemplo, yo quiero ver sus correos electrónicos o el teléfono de su
mujer, lo único que necesito es usar métodos de
interceptación, que me permiten obtener correos, contraseñas, historiales de
teléfono, datos de tarjetas de crédito”, señaló Edward Snowden en una
entrevista con el periódico británico The Guardian. (El Ciudadano:
Nos encontramos ante un nuevo patrón tecnológico de
espionaje que permite interceptar y almacenar todas las llamadas telefónicas,
correos electrónicos, mensajes de voz y texto, y todos los que lleguen a
existir.
Sin que nos diéramos cuenta se ha llegado a la
militarización del ciberespacio que ha pasado a ser uno de los ejes de la estrategia militar
estadounidense de control y dominación mundial. En octubre de 2009 comenzó a
operar el Comando Cibernético de Estados Unidos.
Sabemos también y sino busquen google maps, que los
satélites pueden captar imágenes de nuestra vida cotidiana.
Aquel principio que dice que toda persona es inocente hasta
que se pruebe lo contrario acá aparece dejado totalmente de lado, los gobiernos parten de la idea de que todos
somos, sospechosos. ¿de qué?, no se sabe, pero algo es seguro, somos
potencialmente peligrosos. Se nos mantiene en libertad vigilada pese a no estar
condenados por nada.
Alguien se arrogó el derecho de tener registrada mi vida
privada, mis charlas, mis amores y rencores, también mis dolores y ansiedades.
Constantemente se nos venden los derechos a los que tenemos
acceso, hasta el hartazgo escuchamos hablar del individuo, de los derechos del
individuo, y mucho más aún de la libertad, de la privacidad, mientras en la
práctica todo eso queda abolido por los intereses de los gobiernos y a través
de estos, de las empresas financieras y comerciales.
Alguien sentado en algún escritorio puede decidir,
escuchando mis palabras, leyendo mis correos electrónicos o mi facebook que soy
peligroso y hasta puede mandar un dron a matarme.
Me podrás decir que exagero, es verdad, y lo hago porque así
en gran escala se puede ver lo que en pequeño pasa disimulado. Mientras escribo
esta nota no puede dejar de tener presente que alguien la estará controlando
policíacamente. Ya no nos alcanza con el ojo de dios que todo lo ve y lo juzga,
ahora también tenemos el omnipresente ojo del gobierno.
¿por qué hablo “del gobierno” en general y no específicamente del gobierno
estadounidense?
Porque creo que el gobierno estadounidense tiene el poder
político y económico para llevar adelante este tipo de programas, pero que el
resto, en menor escala, también lo hacen.
Para ser justo también tengo que decir que esto no es
exclusivo de los gobiernos, nos guste o no, autoricemos o no, nuestros datos
integran cientos de listas que son vendidas a empresas para distintos fines, el
más inocente es para mandarnos publicidad, por eso los bancos nos envían ofertas
de tarjetas de crédito, las agencias de turismo nos quieren entusiasmar con
viajes. Los servidores tienen acceso a
nuestra información que es mucha más de la que pensamos.
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| El ojo. Salvador Dalí. 1945 |
Podemos preguntarnos ¿por casa cómo andamos?
El gobierno argentino está utilizando desde el 2011 un
sistema biométrico que a través del nuevo DNI registra los rostros y huellas dactilares de toda la
población. Es conocido como SIBIOS –Sistema
Federal de Identificación Biométrica para la Seguridad- lo que constituye de por sí una de violación
a las libertades individuales.
Un dato biométrico es una característica física única que
permite identificar con poco margen de error a una persona.
Permitirá a los organismos de seguridad -Policía Federal,
Gendarmería, Prefectura, Policías provinciales y otros- cruzar información de
datos biométricos y otros datos personales.
Como este tipo de programas tienen una finalidad bien clara
de control social, no fue publicitado por los grandes medios de comunicación ni
por los gobiernos nacional o provinciales, tampoco hubo debate social.
En marzo de 2012 el gobierno señaló que había 14 millones de
registros biométricos y que llegarían a completar los 40 millones de argentinos
en los siguientes dos años.
Este tipo de control sobre ciudadanos libres y sin condena
alguna representa un grado de poder enorme en manos de un gobierno que de ese
modo podrá seguir los movimientos de cualquier persona y ya sabemos qué sucede
cuando un gobierno, un estado llega a acumular tal grado de poder sobre la
población. Nuevamente estamos ya en la pesadilla.
Ignacio Ramonet, director de Le Monde Diplomatique escribió
acerca de esto en un artículo que se llama: ¡Todos fichados! en el que recuerda
al soldado Bradley Manning, acusado de filtrar secretos a WikiLeaks, a Julian
Assange y a Edward Snowden, llamándolos “paladines de la libertad de expresión,
luchadores en beneficio de la salud de la democracia y de los intereses de todos
los ciudadanos del planeta.”
Ramonet finaliza su artículo diciendo:
“¿Por qué estos tres héroes de nuestro tiempo aceptaron
semejante riesgo que les puede hasta costar la vida? Edward Snowden, obligado a
pedir asilo político en Ecuador, contesta: “Cuando te das cuenta de que el
mundo que ayudaste a crear va a ser peor para la próxima generación y para las
siguientes, y que se extienden las capacidades de esa arquitectura de opresión,
comprendes que es necesario aceptar cualquier riesgo. Sin que te importen las
consecuencias”.”
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